Los limones son refrescantes y versátiles y poseen muchos beneficios prácticos. Lo más increíble es que a pesar de que son ácidos y amargos de sabor, los limones tienen un efecto alcalinizante en el cuerpo. Beber jugo de limón en la mañana es un hábito saludable ya que es un fruto curativo, preventivo y de aporte vitamínico, con propiedades que ayudan a eliminar toxinas y a la vez resulta ser un poderoso bactericida. Es utilizado como un componente destacado para la limpieza de la piel.
Para mantener a nuestro organismo en óptimas condiciones necesitamos beber mucha agua, por lo que si le agregamos los beneficios del limón, obtendremos un cuerpo más saludable. Además el limón es un purificador para la sangre.
Existen cosas tan sencillas de hacer y que prácticamente no cuestan dinero. Un gran hábito es empezar el día con una taza de agua tibia y el jugo de medio limón.
Yo he podido comprobar sus beneficios y te aseguro que después de probarlo se volverá una rutina que no querrás dejar. A continuación, los 5 beneficios de beber agua con limón.
- Ayuda a bajar de peso: Los limones son ricos en fibra pectina, que ayuda a luchar contra el hambre y los antojos. También se ha demostrado que las personas que mantienen una dieta más alcalina pierden peso más rápido.
- Ayuda a la digestión: El jugo de limón ayuda a eliminar los materiales no deseados. Una digestión eficiente reduce la acidez estomacal y el estreñimiento.
- Es un diurético: El jugo de limón aumentan la tasa de la micción en el cuerpo, lo que ayuda a purificarlo liberando las toxinas más rápido.
- Mantiene la piel más saludable: El componente de la vitamina C ayuda a disminuir las arrugas y manchas. También, el agua con limón elimina las toxinas de la sangre y ayuda a mantener la piel clara. También puede ser aplicado directamente en las cicatrices para ayudar a reducir su aspecto.
- Alivia los problemas respiratorios: La vitamina C en abundancia ayuda a reforzar las defensas del organismo para evitar enfermedades de las vías respiratorias como el resfriado, amigdalitis, pulmonía, bronquitis, gripe, asma etc.